La magia


Hacer magia es tratar de curar una ilusión con otras ilusiones, como por ejemplo intentar sanar el dolor con medicinas o cirugía. Es un método que utilizas para reafirmar que hay algo externo a ti que te puede ayudar. Cuando escuchas al ego te es fácil creer en esa ayuda externa, ya sea el aire que respiras, un tenedor, unas aspirinas, o el suelo que pisas. Pero nada de esto existe. El ego te mantiene en la creencia en el error, en lo falso, en lo ilusorio.  Puedes vivir en el mundo, puedes seguir respirando, bebiendo agua o caminando, pero bajo la tutela del Espíritu Santo,  del Guía Interior, que te recuerda a cada momento que todo eso no es real y que lo único que hay es la luz del Amor de Dios. No eres un cuerpo y todo lo que hay es tu Ser.

El ego te 'recompensará' con miedo, se valdrá de mil modos para demostrarte que estás en un error, pero no permitas que eso te tenga 'atrapado'. Así, la enfermedad y el dolor es su manera de tenerte atrapado.
Si Dios te creó perfecto, eres perfecto. Si crees que puedes estar enfermo, has antepuesto otros dioses a Él. Dios no está en guerra con el dios de la enfermedad que inventaste, pero tú si. Este dios es el símbolo de tu decisión de oponerte a Dios, y tienes miedo de él porque no se le puede reconciliar con la Voluntad de Dios. Si lo atacas, harás que sea real para ti. Pero si te niegas a adorarlo, sea cual sea la forma en que se presente ante ti, o el lugar donde creas verlo, desaparecerá en la nada de donde provino.*
Ninguna ilusión puede ser real, sea cual sea la forma en que aparezca.

La magia no tiene ningún sentido, todo lo que pretende salvar no existe, creyendo en ella sólo te aprisionas a ti mismo, viéndola como lo que es te liberas

Empezar a ver la ilusión como lo que es te ayuda a centrar tu camino en la verdad. No se te pide que no utilices la magia sino que seas consciente de que sólo es alimento para el ego y que en verdad no es nada. 

Nada te puede dañar, pues no es ésa la Voluntad de Dios.

Si crees en la magia simplemente estás substituyendo la Voluntad de Dios por la del ego. 
Dios te ha dado un regalo que simultáneamente tienes y eres. Cuando no lo usas, te olvidas de que lo tienes. Al no recordarlo, no sabes lo que eres. *  
Niega lo que eres y atacarás, al creer que has sido atacado. Mas ve el Amor de Dios en ti y lo verás en todas partes porque está en todas partes. *
A medida que vayas avanzando en tu camino tú mismo dejarás de alimentar al ego y te darás el justo Valor que te mereces.
¿Qué podría despertar más dulcemente a un niño que una tierna Voz que no lo asusta sino que simplemente le recuerda que la noche ya pasó y que la luz ha llegado? No se le dice que las pesadillas que lo estaban aterrorizando tanto no eran reales, pues los niños creen en la magia. Simplemente se le asegura que ahora está a salvo. Más tarde se le enseña a distinguir la diferencia entre estar dormido y estar despierto, para que entienda que no tiene que tener miedo de los sueños. Y así, cuando vuelva a tener pesadillas, él mismo invocará la luz para desvanecerlas. *












Texto de Un Curso de Milagros